180 Grados.

En esta caso les hablaré de una Diocidencia, porque a los que conocemos a Dios sabemos que no existen las coincidencias, todo esta en manos de nuestro Padre.

Un día ya por estos medios me enteré sobre una convocatoria para tocar en la libreria Visión. De inmediato le comenté a mi prima y la convencí de mandar el demo que tenía, de inmediato se emocionó y lo hizo. Unos días después ya nos habíamos olvidado de ello, pensamos que no había sido elegido como finalista dado que el evento era en dos días y decidimos no darle demasiada importancia para no sentirnos desilusionadas, ya que sabemos que Dios es quien dice la última palabra. Nos encontrabamos juntas en su casa cuando el telefono sonó para avisarnos que habiamos sido seleccionados y que cantaríamos en dos días. ¡Empezamos a correr! mi prima Abril vino de Puebla para participar en el evento, al que yo no pude asistir más que de oyente . . . pero esa es otra historia.

Al llegar ahí aún habrían más sorpresas. . . varias de las bandas elegidas no llegaron y la otra banda llamada 180 grados invito a mis primas a cantar con ellas el resto de las canciones para el evento. De ahí nació una hermosa amistad con la banda, asi como nuestra admiración para con ellos dado que a sus cortas edades solo muestran los dones y habilidades que Dios ha puesto en cada uno de estos jóvenes que aman a Dios.

Dos días después tuvimos una noticia impresionante, un día después del evento dos de los chicos de la banda tuvieron un accidente y murieron. Para nosotras fue un shock, tantas cosas que pasan por nuestras cabezas en ese momento. Pero sabemos que esto no fue un accidente que Dios en su soberania sabe porque hace las cosas, para nosotros es dificil entenderlo y fuera de Dios quizá nos lamentaríamos o culpariamos a Dios de lo sucedido, mientras que la realidad es completamente diferente. Estos chicos amaban y dependían de Dios a pesar de su juventud, personalmente creo que no pudo haber un mejor momento, ellos estan ahora en su presencia y eso debería de ser motivo de júbilo. Para cada uno de los hijos de Dios nuestra mayor Ilusión es ver y estar con Cristo nuestro Señor. Aunque no podemos negar en nuestra naturaleza que las despedidas son dolorosas y que extrañamos a nuestra gente amada, pero sabemos en donde esta nuestra confianza y en donde se encuentran estos jovenes.

Por nuestra parte nos sentimos realmente bendecidas de haberlos conocido y de algún modo haber estado en estos momentos dificiles para ellos. De aquí surgió esta hermosa amistad que esperemos que el Señor siga fortaleciendo. Mi oración es que Dios restaure el corazón de todos aquellos que sufren aún por la ausencia de estos jóvenes, que los llene de paz y los siga usando poderosamente como hasta ahora, porque nuestro Padre tiene grandes planes para ustedes chicos, los queremos.

"Pues para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia". Filipenses 1:21